De una parte, la necesidad de ganar algo de dinero extra ante una inflación exagerada y una delicada situación económica, hace que algunos decidan destinar una ínfima parte de su salario a probar suerte por esa vía.
De otra, las posibilidades que brinda internet, que convierten el proceso en algo mucho más cómodo que tener que acudir a una boletería, y finalmente, que hace algunos años es posible jugar loterías de fuera del país e incluso del continente. Las loterías extranjeras ya son completamente accesibles gracias a boleterías online autorizadas.
El hecho de que exista una mayor afición por las loterías no significa que la gente esté más dispuesta a desembolsar dinero. Lo que sí sucede es que se han replanteado cómo hacerlo para poder conseguir más por menos. ¿Es acaso esto posible? En parte sí. Lo mismo que sucede con las apuestas deportivas, en las loterías se pueden jugar combinadas que maximicen las posibilidades de éxito por un poco más dinero.
Sí, se abona algo más, pero si por ejemplo la lotería debe acertar cinco números y se juegan sis, las combinaciones de cinco números se disparan significativamente, pudiendo conseguir más por menos.
Aún así, son los grupos de juego los que están consolidándose como la mejor opción, eso sí, cuando se forman por personas que confían las unas en las otras y son conscientes de la responsabilidad que conlleva como miembro o como administrador pertenecer al grupo.
Estos grupos llegan a un consenso para poner una cantidad semanalmente y adquirir varios números o loterías diferentes. El desembolso es el mismo y las probabilidades de ganar son muchas más, una por cada boleto jugado. Es común ganar pequeñas cantidades cada semana y que estas sean repartidas entre todos los miembros.
De hecho es la única parte mala, el tener que dividir cualquier importe entre todos, aunque justo esta sea también la parte buena si es que toca pagar. Luego ya cada grupo decide si sus pequeñas ganancias semanales se mantienen en la cuenta para reinvertirse y a partir de una cantidad en concreto se reparten o bien cada vez que hay beneficios se reembolsan a cada miembro a pesar de que vuelvan a poner su importe semanal.
Está y otras cuestiones son las que deben estipularse en el contrato del grupo (muy recomendable), sobre todo porque todo debe estar muy claro si se gana un Gran Premio, y seamos sinceros, los grupos de juego tienen bastantes más probabilidades que los jugadores individuales porque pueden jugar incluso 24 números a la vez, por poner un ejemplo.
De hecho uno de los casos más sonados cumple el próximo mes de enero un año y fue un MegaMillions de US$ 437 millones ganado por un grupo de 23 compañeros de trabajo newyorkinos. ¿Cómo repartir el dinero? Corresponde lo mismo a cada miembro independientemente de su antigüedad? ¿Se reparte antes o después de que se le apliquen impuestos? ¿Se hace público o se mantiene el anonimato para cada uno de los ganadores?
Desde luego, es una ardua tarea pero estos grupos de juego están ya tan extendidos que incluso podemos encontrar manuales y modelos de contratos en internet para descargarlos y aplicarlos a la situación concreta de cada uno.
Estos grupos operan en ocasiones de manera offline pero debido a las comodidades y facilidades de internet (el boleto no se deteriora, no hay que hacer colas, nos notifican directamente si hemos ganado o no, el cobro se produce automáticamente si hay beneficios) cada vez es más común que operen online.
Hay quienes llegan a estas boleterías con el grupo ya consolidado y otras que deciden incorporarse a grupos que ya están funcionando en esa boletería en concreto.
De una u otra manera, siempre están formados por personas que son afines en su afán por ganar y su asiduidad, por lo que en ese sentido no suelen tener conflictos ya que suelen todos cumplir la normativa interna. El compromiso en su camino hacia el éxito se puede comparar con el de los equipos de fútbol intentando ascender a categorías superiores.
