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La Encrucijada: Entre mentiras, verdades y posibles delitos, por la Jueza Mariel Suárez

Escrito por Mariel Suárez, Jueza Penal, experta en Protección de Datos y Cibercrimen-. Luego de la noticia de los marineros portadores de Covid 19, así nos encontramos los ciudadanos de ésta ciudad hoy, en una triste encrucijada y les voy a contar por qué.

Resulta que numerosas noticias se publicaron en relación al caso. Debo destacar indudablemente la labor de los medios de comunicación de la Provincia, especialmente los medios telemáticos, gráficos, radiales y televisivos de la ciudad de Comodoro, que en todo momento informaron, sin violar reglas éticas, respetando la privacidad de los pacientes, que para nada están pasando un buen momento, sino todo lo contrario.

Entre el aluvión de noticias, se nos quiere hacer creer que los marineros, no bajaron del barco sino hasta el viernes 12 cuando, oportunidad en la que hicieron el “protocolo” en el Puerto a cargo de su titular.

Si revisamos bien y analizamos los pormenores, nos daremos cuenta usando sentido común que, si a esta altura, se encuentran en estudio una centena de posibles casos a raíz de estrechos contactos con los marineros, resulta evidente como se dijo en alguna otra noticia, que los marineros bajaron en alguna oportunidad del barco y váyase a saber cuál fue el motivo que los provoco a regresar, lo que le fue útil a las autoridades portuarias, para activar el famoso protocolo.

El Municipio se esforzó por cumplir los protocolos e ir abriendo la circulación por etapas, o sea que hasta que paso lo del Puerto, es cierto como señala el intendente, no hubo circulación comunitaria del virus.

Es evidente que resulta necesaria la intervención de las autoridades de la Justicia Federal, por denuncia o por oficio, dado que esta situación debe esclarecerse lo más pronto posible y debe, además investigarse responsabilidades de los funcionarios públicos nacionales y provinciales que intervinieron en el tema, pues existe desinformación intencional, mala información intencionalmente dada y  violación de la cuarentena, todo ello en el ámbito de las actividades portuarias.

Por suerte, en el puerto existen registros de cada movimiento que se llevó adelante, lo que será útil para averiguar la verdad.

Si a los particulares se les imputan delitos cuando desinforman o cuando violan la cuarentena, los funcionarios también deberían responder por ello.

Los ciudadanos de Comodoro hicimos las cosas bien, y merecemos respuestas por quienes nos representan y las hicieron mal.