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Justicia y Poder Judicial: las serpientes muerden solo a quienes andan descalzos

Por Cristian Aliaga (Director de El Extremo Sur).

Si Macri delega la economía en el Fondo Monetario Internacional y la política en Comodoro Py –y se deja defender por un ultramontano de humor dudoso como Casero–, ¿qué le queda por hacer a un gobernador lastrado por el endeudamiento que le legaron propios y ajenos, la desintegración del partido provincial que lo llevó al gobierno en medio de la corrupción y una provincia que pasó del Paraíso al Infierno sin escalas?

Como todas y todos los ciudadanos de a pie, el gobernador de Chubut se levanta siempre aterrado por cada uno de los recortes, ajustes o garrotazos que caerán sobre las cuentas provinciales; y de los que se enterará democráticamente a través de las redes sociales o mediante el griterío de los perjudicados.

El Boletín Oficial desborda de medidas escalofriantes cada día, y hace empalidecer la imaginación de Mary Shelley y hasta la del mismísimo Philip K. Dick.

Mariano Arcioni se desliza entre curiosas fotos amables con Maru Vidal –ya no tan incombustible después del escándalo de la financiación irregular de las campañas–, los guiños ahora reticentes con Frigerio o Peña –siempre despectivos con el “interior”– y el horror gestual por los recortes interminables del Hombre (del) Flan.

Como publicáramos detalladamente en El Extremo Sur, Macri se propone recortar fondos en la Patagonia por 21.800 millones de pesos. A Chubut le toca un recorte de $5.400 millones, y es la más perjudicada de la región. A las Universidades del sur la tijera les quitará 184 millones de pesos.

Durante el primer semestre de 2018 el gobierno de Cambiemos le envió a Chubut 25% menos de fondos para la obra pública. El ajuste empezó antes que el acuerdo con el FMI. “Vamos fusilando mientras llega la orden” se titula una gran novela de Belgrano Rawson.

Sin embargo, hay datos contradictorios para la provincia, porque el aumento portentoso de las exportaciones petroleras engrosará indefectiblemente las cuentas corrientes de Chubut. Si fuera cierto lo que operadores macristas dicen por lo bajo, Arcioni podría romper con el pago escalonado de salarios y normalizar en cierta medida a la provincia.

Para los muchachos de Cambiemos, el gobernador huye hacia adelante. “Retiene fondos y se prepara para lanzar su propia campaña”, dicen. El sentido común indica que Arcioni tiene que mostrarse como candidato aunque sea para ganar tiempo y llegar a 2019.

Mentira o verdad, el repaso de las cuentas corrientes de la provincia en el banco Chubut muestra recursos significativos.

Mientras Macri viaja a poner la cara personalmente ante los fondos buitres después del fracaso de sus enviados, amenazado por la posibilidad de no cumplir con las “metas” del FMI, los gobiernos provinciales empiezan a recibir más fondos de la Coparticipación; lo que se vuelve una trampa para gobernadores, o directamente una trampa caza bobos para quienes utilicen esos dineros discrecionalmente o como apriete indirecto.

Los mandatarios que bajo la presión de los cuadernos Gloria o los papeles de la escribanía acepten el juego de convalidar el proyecto brutal del gobierno nacional quedarán expuestos en su poltrona o zona de confort individual, mientras quienes tendrán que afrontar el grueso del ajuste serán los beneficiarios de las asignaciones familiares, los que cobran el incentivo docente, los estatales en general, los despedidos del sector privado,  los usuarios del transporte público,  los obreros de la construcción y los que no pueden pagar ni créditos ni pan por la inflación galopante, por ejemplo.

Grietas

Macri escenifica La Grieta para que no sea vea la Falla de San Andrés que está debajo suyo, con una economía que parece encaminarse a un nuevo default.

Es evidente que para él el objetivo es defaultear la política, avalado por el descrédito público del kirchnerismo. Ocurre que cuando hay crisis concretas de escala real (no hay medicamentos en Lagunita Salada o energía eléctrica en Gobernador Costa) no se trata de “la grieta” sino de la ausencia del Estado –nacional y provincial–.

A Arcioni las causas Embrujo, Revelación o La Que Venga le sientan bien como telón de fondo del caos, porque despejan el escenario y ocupan a una parte de la sociedad en el seguimiento mediático de tres grupos emblemáticos a los que supuestamente persigue por igual el Ministerio Fiscal: Los Importantes, Los Perejiles y Los Empresarios.

Los primeros son, casi invariablemente, actores de reparto de la era decadente del dasnevismo. Las excepciones que pueden romper la regla parecen ser Gonzalo Carpintero, Pablo Oca y Víctor Cisterna. Habrá que ver qué delitos logran probarles, y las penas de cumplimiento efectivo que conllevan.

Por ahora, todo el foco está colocado en el inefable Correa y su troupe de filibusteros de película de bajo presupuesto. Perejiles o listos de centavos, como escribió el Indio Solari, jamás transaron grandes negocios en la infraestructura sistémica de la corrupción que va desde Macri padre hasta los Rocca y Cristóbal López. El Olimpo de la corrupción, donde se timbea y se blanquea por igual.

Los Empresarios de Chubut no se sienten cómplices, siguiendo el fastuoso ejemplo del gran Paolo Rocca, que siguen a pie juntillas desde Techint  pero también desde Tecpetrol.

Por el contrario, perciben que los fiscales les abrieron la puerta del “asistencialismo bueno”. Ya están seguros de que si construyen playones, reparan comisarías o cantan el himno a todo pulmón podrán irse a casa como Calcaterra, el primo del Presidente. Así se suspendería el juicio a prueba, se extinguiría la acción penal y good show como decía un antiguo humorista; aunque en Chubut no existe la figura del “arrepentido”.

Habrá que ver si el juez convalida esa idea de los fiscales sin exponerse a un juicio político.

Por si fuera poco, las cifras de “recuperación” económica que airean los propios miembros del MPF suenan irrisorias si se mira el mapa de la destrucción chubutense y los montos de la deuda social y económica. Difícilmente los aportes del “asistencialismo bueno” de los empresarios resulte suficiente para reparar nada significativo.

Hasta ahora resulta evidente que el solitario, excéntrico y silencioso Federico Piccione, el comodorense que no habla y en consecuencia no accede a la prisión domiciliaria, es un símbolo de la diferencia dentro de un conjunto de empresarios que saben recitar guiones que los devuelven al calor de sus propias moradas. Piccioni empieza a parecerse a Cristóbal López: ¿tendrá tanto que contar si el sistema le suelta la mano?

Ruidos I

La interna de la Fiscalía es cada vez más áspera. Pronto habrá un torneo de póker entre los “puros” que llevan la causa Embrujo vs. los “santos” de Revelación, y nadie podrá levantarse de la mesa jamás.

Nadie asume ahora en el Frente para la Victoria que la decisión de someter a Miquelarena a un juicio político estaba tomada antes de que Correa exhibiera sus métodos ILVEM, pero distintas fuentes confirman que al Procurador estaban por llamarlo de Comodoro Py por su actuación como fiscal de Estado en el espinoso tema de la renovación de los contratos petroleros, aprobados cuando Das Neves era el más dotado de la Fiesta.

MIquelarena releyó el manual de su gremio y decidió fortalecerse con una causa noble, admiten todos los sectores políticos. Al mismo tiempo logró reacomodarse políticamente tras la muerte de Das Neves, su gran valedor histórico.

Aunque algunos dan por sentado (y celebran por anticipado) que las investigaciones podrían extenderse hacia atrás en el tiempo –e incluso llegar al extremo de reabrir causas denunciadas por el siempre picante Eduardo Samamé, un radical atípico– es muy improbable que eso ocurra. Profundidad sí, pero no tanta como para ahogarse en el propio sumidero. Un movimiento así podría complicar incluso al propio Miquelarena.

Ruidos II

Estudios jurídicos que siguen las causas desde el Valle aseguran que la documentación hallada en distintos allanamientos involucra a distintos sectores políticos, pero que solo filtró en detalle la que afectaría a la familia Das Neves.

Se habría secuestrado información referente a cuentas off shore en paraísos fiscales como Bahamas e Islas Caimán que pertenecerían a ex funcionarios del gobierno anterior al de Das Neves. En el allanamiento a domicilios de Gonzalo Carpintero se habría encontrado una libreta de anotaciones con pagos a una persona ligada directamente a una destacada concejal de Trelew. Esa persona estaría siendo observada además como financista de campaña en la campaña 2015 de Maderna. En los presuntos Rivadavia (de hoja más resistente) del ex secretario privado habrían hallado además notas sobre pagos a operadores políticos.

Si esta información está registrada directamente en las actas de secuestro de los allanamientos, resulta llamativo que no se hayan establecido las diligencias correspondientes; como la que debería confirmar o descartar si existieron cesiones de tierras realizadas por la Municipalidad de Trelew a la empresa Dual Core de Correa y compañía.

Los sectores sobrevivientes del dasnevismo apuntan sobre el fiscal Marcos Nápoli, quien paradójicamente anunció que investigaría al ex gobernador Martin Buzzi y a gestiones anteriores. Desde ese sector aseguran que Nápoli no toma distancia de su militancia “ultra k” y “antidasnevista” manifestada en redes sociales, y que sus decisiones pueden interpretarse como un juicio “político” del FpV al desprestigiado Chusoto. Otro fiscal con pasado en Comodoro y Esquel apura el paso de la causa en sus manos, tratando de borrar la lentitud del pasado con la osadía que exhibe en el presente.