Uno de los puntos anunciados por el nuevo gobernador Claudio Vidal en su primera conferencia de prensa, fue ordenar una auditoría general del Estado, para conocer las condiciones en que comienza su gestión. Esto se debió, según declaró en otras oportunidades, a las dificultades que en general tuvo la transición del gobierno, desde el día posterior a ganar las elecciones del 13 de agosto, hasta su asunción.
El anuncio de Vidal quedó formalizado en el Decreto 017 fechado el pasado viernes. Allí, el mandatario provincial instruye a los titulares y máximas autoridades de ministerios y organismos de la administración pública provincial centralizada y descentralizada, entes autárquicos, sociedades del Estado y sociedades anónimas con participación estatal mayoritaria “a realizar auditorías de control interno a fin de determinar el estado de situación actual económico-financiero-patrimonial, y de personal”.
“Corresponde relevar toda adquisición de bienes de capital, contrataciones de bienes y servicios, contratos de suministros y obras públicas que signifiquen compromisos de fondos del tesoro provincial y de los recursos específicos administrados por los organismos, así como todas las concesiones administrativas”, afirma Vidal en su decreto.
El gobernador también solicita a las áreas de Recursos Humanos y de personal de las jurisdicciones citadas a efectuar un “relevamiento y control del personal que integra la planta del Estado”.
Los informes y relevamientos recabados deberán ser presentados dentro de los 45 días corridos al dictado del decreto. El jefe de Gabinete de Ministros, Daniel Álvarez, estará a cargo de analizarlos y dar intervención a la Contaduría General de la provincia.
