(Por Mariel Suárez Jueza Penal, Experta en Derechos Digitales, Triple Magister Cibercrimen Ciberseguridad y Perito Informática Forense, Profesora invitada en Universidades extranjeras, autora de publicaciones varias)- Los derechos humanos por lo general se clasifican en generaciones o dimensiones. La ONU o UN, por sus siglas en inglés, desde hace varios años se refiere a los derechos digitales como derechos humanos. A modo de síntesis, los derechos humanos en general se pueden considerar como:
- De primera generación: los cuales se refiere a los derechos individuales fundamentales como la vida, la integridad física, la libertad, la igualdad los que son producto de procesos revolucionarios como la Revolución Francesa.
- De segunda generación: se trata de los derechos económicos, sociales y culturales, relacionados a una adecuada calidad de vida como el derecho al trabajo, el derecho de pertenecer a un sindicato, el derecho a la salud y a la educación.
- De tercera generación: son los derechos colectivos que pertenecen a un conjunto de personas como el derecho al desarrollo sostenible, el derecho a la paz, el derecho al medio ambiente sano, derechos de los consumidores, o la protección frente a la manipulación genética.
La cuarta generación de derechos humanos: los derechos digitales
En el ciberespacio, tenemos todos nuestros derechos intactos como libertad de expresión y opinión, siempre y cuando respetemos la de los otros, pero además de ello, se suman los relacionados con el desarrollo tecnológico, las tecnologías de la información, la comunicación y el ciberespacio. Para tener una idea de lo que hablamos:
- El derecho a la inclusión digital y al acceso igualitario: que implica el acceso a las tecnologías de la información, a internet, a la informática, la implementación de políticas educativas que tiendan a evitar la exclusión digital por ejemplo de los adultos mayores, que hoy resultan ser la franja etaria más afectada por el cibercrimen en el mundo.
- El derecho a la seguridad digital: las prestadoras de servicios, de internet, bancos, sitios de compra-venta, monederos digitales, tienen la obligación de proporcionarnos mecanismos que aseguren nuestro desempeño en las redes.
- A la protección y confidencialidad de nuestros datos: nuestros datos están siendo expuestos de manera continua a mayor cantidad de personas, por ende, todo aquel que maneje el paquete de datos del ciudadano sean: redes sociales, empresas públicas o privadas relacionadas a la salud, al comercio, organismos del estado como los registros del automotor, poderes judiciales, entre otros, tienen la obligación de adoptar medidas tendientes a proteger esos datos que manejan, porque sencillamente son nuestros datos.
- A la igualdad y a los Derechos y Justicia Social Internet es un espacio para la promoción, protección y cumplimiento de los Derechos Humanos y el avance de la justicia social. Toda persona tiene el deber de respetar los derechos de los demás en el entorno digital y tenemos derecho a acceder a todo el contenido sin restricciones.
- A la Diversidad cultural y lingüística en Internet la que debe ser promovida dado que la innovación técnica y política deben alentar y facilitar la pluralidad de expresión.
Cuando hablamos de nuestros derechos, también nos referimos a que otro tiene la obligación de satisfacerlos, en este caso los obligados son: el Estado el obligado, el Estado en todas sus formas y representaciones: Estado Nacional, Estado Provincial y Estado Municipal y, también el sector privado, redes sociales, empresas de telefonía, de internet, de salud, entre otras, empresas que manejen bases de datos como nombre, teléfono, direcciones, gustos, intereses, nuestra imagen.
Como usuarios de la red, también tenemos obligaciones que cumplir, para poder exigir esos derechos más tarde. A modo de ejemplo podemos nombrar:
- Un comportamiento responsable en la red: sin insultar, sin juzgar sin agredir al otro.
- Cuidar nuestros datos: no exponiéndolos, usando claves fuertes las que contengan números, símbolos, letras mayúsculas y minúsculas y, no repetirlas en nuestras distintas cuentas.
- Educar a nuestros mayores y niños, niñas y adolescentes en el uso responsable de la red.
La pandemia aceleró nuestros procesos de conexión al mundo digital, es algo que tarde o temprano iba a ocurrir, quizás en 5 o 10 años, esto generó que nos enfrentemos a muchas situaciones nuevas, como por ejemplo el cibercrimen, algo que nos parecía lejano a nuestro entorno, sin embargo, hoy no nos falta un familiar, amigo o compañero de trabajo que lo haya sufrido.
Para que internet sea segura para todos, nos queda primero cumplir con nuestras obligaciones y reclamar nuestros derechos y para ello podemos por ejemplo:
- Exigir medidas de seguridad a las empresas y organismos del estado: nosotros como usuarios tenemos el derecho de reclamar mayores y mejores de medidas como que pongan factor doble autenticación en préstamos pre aprobados.
- Exigir un mejor servicio de conexión, reclamar por inversión o buscar alternativas.
Somos lo que somos, no lo que mostramos en las redes. Tenemos que entender que las redes están para promocionar el desarrollo del hombre en todas sus facetas, laboral, social, educativa y un comportamiento saludable creará un entorno más seguro.
No andamos desnudos por la calle mientras vamos a trabajar, no andamos en un auto con megáfono gritando nuestros datos personales como números de cuenta, claves y correos. No vamos por la vida ofreciendo nuestra billetera a cuanta persona se nos cruce. No hagamos eso en la red. Promovamos con nuestro comportamiento una mayor conciencia de la importancia de contar con una fuente de conocimiento libre y participativa dentro de una cultura digital eso si realmente queremos lograr una sociedad más humana, justa y solidaria, en la que ciencia y tecnología sean herramientas fundamentales en la promoción de fines socialmente relevantes.
Vivamos nuestra ciudadanía digital a pleno, respetando al prójimo y exigiendo nuestros derechos.