El hombre vive en una construcción de modestas condiciones edificada con cartón, chapa y algunos tirantes de madera, en la calle Cerro Centinela.
Fue momentos antes de las seis de la mañana y el propio damnificado pidió auxilio a unos vecinos y llamó a la policía ni bien logró volver en sí, a los minutos de que se fueran los asaltantes. Cuando llegaron las autoridades lo encontraron muy ensangrentado con heridas importantes en la cara y en el cuero cabelludo por lo que pidieron inmediatamente la concurrencia de una ambulancia para que fuera trasladado al hospital.
“Los sujetos entraron, uno de ellos tomó tomo un elemento contundente y le pegó en el rostro y en la cabeza haciendo que perdiera el conocimiento”, consignó en declaraciones a Radio 3 el jefe accidental de la comisaría Tercera, el subcomisario Maximiliano Silva.
“Estas personas aprovecharon esa circunstancia y le sustrajeron una garrafa de diez kilos, y herramientas. Revolvieron buscando otros elementos de valor y al no encontrar más nada se retiraron del lugar; la victima aprovechó y llamó a la policía”, acotó.
–En el vecindario dicen que puede ser gente que vive en ese mismo sector, ustedes lo tienen en cuenta ¿no? Se le apuntó. “Sí, puede ser que sean de ahí nomás porque la intervención nuestra fue inmediata y no pudimos dar con ningún sospechoso en las inmediaciones”, dijo Silva.
“La persona es un hombre mayor de edad, ya jubilado, que vive en una construcción precaria en un asentamiento. No había hecho ninguna transacción ni tenía elementos de valor como para que estas personas (los malvivientes, lo asaltaran) de esa manera. Así que, debe haber sido al azar, deben haber aprovechado la circunstancia de que la vivienda carece de seguridad”, presumió.
Finalmente se le consultó a Silva, ¿la víctima pudo identificar a alguno de los asaltantes? “No. Imagínese que uno de los primeros golpes que recibió fue en la cabeza que le produjo una gran herida, de la que salía mucha sangre y eso prácticamente lo desmayó; perdió el conocimiento por unos momentos, quedó tirado en el suelo por unos segundos, y no pudo observar qué personas eran”, concluyó.
Dicen que la víctima sufrió una posible fractura en el maxilar y otra en el tabique nasal, además de una herida en el cuero cabelludo. El vecindario, indignado.
