Docentes y alumnos del jardín N°426 vivieron por tercera vez en el año un tiroteo sobre la calle Naranjo. La primera vez sucedió en el mes de mayo en el turno mañana, donde los niños debieron esconderse y resguardarse abajo de la mesa para que las detonaciones no le lleguen.
El segundo, sucedió hace una semana esta vez en el turno tarde. “Estuvieron a los tiros, los chicos se tuvieron que escudar abajo de la mesa, entre ellos mi hijo de 5 años”- contaron en su momento madres en diálogo con Radio del Mar.
La tercera vez, los alumnos no estaban en el establecimiento pero si se encontraban las docentes y auxiliares de educación, quienes nuevamente se tuvieron que resguardar de los tiros y salieron escudadas por la policía.
Luego de efectuar los reclamos y que padres y docentes iniciaran una quema de cubiertas el día viernes para exigir más seguridad, personal policial de la Seccional Séptima se comprometió a enviar a un personal adicional a custodiar el lugar. Sin embargo, este lunes ningún efectivo se encontraba realizando lo prometido en el Jardín. “Aca falta voluntad política”-aseguró una docente en diálogo con el móvil de Nuestras Mañanas.
Asimismo, desde el establecimiento piden que las autoridades “se sienten a establecer un protocolo de seguridad” y que “cumplan con lo que hay prometido, como docentes ya no sabemos que hacer y que decirles a los padres”-expresó.
“La vida nuestra y la de los niños está en juego. No podemos seguir con esta situación, no se la tomaron con la seriedad que corresponde y nos dejaron solos”-agregó.
“Este acta es una tomada de pelo”
Por otro lado y siguiendo en la misma línea, una de las mamás del Jardín del barrio San Martín contó que “el día viernes se firmó un acta de compromiso con la Seccional Séptima, pero lo consideramos una tomada de pelo. No nos sirve y no nos garantiza nada, hoy la policía no estaba en el lugar que nos prometieron”-señaló.
“Queremos que las cosas se hagan como se deben. No puede ser que todos los vecinos del barrio e incluso la policía sepan quienes son los individuos que causan estos destrozos y nadie haga nada”-pidió.
Además, agregado a los problemas de inseguridad se le agrega las faltas en el edificio: “Este es un jardín de chapa, necesitamos también que se mejoren las cuestiones edilicias”.
Finalmente, mencionó que ellos como padres “apoyaremos las decisiones que tomen las maestras para resguardar la integridad física tanto de los alumnos como del personal”-cerró.